La temporada pasada, la liga se quedó en un intercambio de golpes entre Bailén y Úbeda Viva. Desde el inicio, el Úbeda de Manuel Ruiz fue el dueño y dominador de la categoría poniendo un ritmo endiablado al que solo resistió el Bailén de Julián Beltrán, que se encaramó a la segunda plaza siguiendo muy de cerca los pasos del líder para asaltarle finalmente en la última jornada y hacerse con el campeonato. Este año, el poderío económico señala como favoritos a un par de equipos, sin embargo, en cinco jornadas que llevamos disputadas ya ha habido más líderes que en todo el año pasado.
Los focos apuntan, entre otros, a un Villacarrillo que, aunque su entrenador es cauto en sus declaraciones, tiene un proyecto ambicioso con Pipa y Vinuesa como pilares, y con Zubi y Caravaca como principales artilleros. Eso sí, el equipo parece cocinarse a fuego lento ya que la mezcla aun no la hace bien. Pegada demoledora arriba, seguridad atrás y poco más, lo que les basta para ser líderes, sin embargo, para estar arriba al final y evitar sustos como el que se llevó en Mancha Real, es necesario algo más de juego, y eso llegará cuando los dos del centro reclamen su protagonismo.
Protagonismo que cede el Útica con su tropiezo en Villanueva del Arzobispo. Aunque no la comparto, hay quien defiende la opinión de que el Útica se desinflará en cuanto empiecen las corridas fuertes, y la “plaza” de San Blas era una de ellas. No creo que vaya por ahí el asunto, esta semana se han topado con un Villanueva al que encuentro como uno de los equipos más peligrosos e incómodos de la liga, si no el que más. Jesús Cuevas ha confeccionado un grupo serio, compacto y con mucho oficio que sabe adaptarse a cualquier situación de partido. Si tienen que defender, defieden como nadie, y cuando atacan, lo hacen con velocidad y haciendo mucho daño. Supieron sufrir en Los Villares y casi rascan un punto, fueron dominados en La Carolina y el infortunio les privó al final de llevarse la victoria, y esta semana vencieron a un Útica que viene realizando el mejor fútbol de la categoría. Lo contrario, precisamente, que el Útica, máximos goleadores hasta el momento que tienen en Majuelos al faro que guía el juego ofensivo del equipo pero que encuentran dificultades para mantener la portería a cero. Preocupan los siete goles en contra que llevan los de Antonio Pastor, el equipo más goleado de los nueve primeros de la tabla.
Y mención a parte merecen Racing Jaén Clima y Carolinense, clubs donde nadie cobra un solo euro y sin embargo parece que aguantarán el tirón de los de arriba e incluso puede que alcancen más protagonismo con el paso de las jornadas. Esta semana, el Carolinense hundió aun más al Villargordo y el Racing aplastó a un Hispania que no discutió el partido en ningún momento ya que la superioridad de los de Joaquín Pérez fue abrumadora con un Pingu en estado de gracia que consiguió su primer hat trick de la temporada. Tan solo una mala noticia dejó el partido para los de la capital, la lesión de rodilla de Jose Manuel cuyo alcance de la gravedad aun se desconoce y que se une a la de Rafa Luque, que estará tres meses de baja por una lesión en su tobillo izquierdo. Este contratiempo nos dejó la anécdota de la jornada, cuando Buyo, portero del Racing, tuvo que entrar en el partido como jugador de campo al haber hecho su equipo los otros cuatro cambios permitidos.
Los focos apuntan, entre otros, a un Villacarrillo que, aunque su entrenador es cauto en sus declaraciones, tiene un proyecto ambicioso con Pipa y Vinuesa como pilares, y con Zubi y Caravaca como principales artilleros. Eso sí, el equipo parece cocinarse a fuego lento ya que la mezcla aun no la hace bien. Pegada demoledora arriba, seguridad atrás y poco más, lo que les basta para ser líderes, sin embargo, para estar arriba al final y evitar sustos como el que se llevó en Mancha Real, es necesario algo más de juego, y eso llegará cuando los dos del centro reclamen su protagonismo.
Protagonismo que cede el Útica con su tropiezo en Villanueva del Arzobispo. Aunque no la comparto, hay quien defiende la opinión de que el Útica se desinflará en cuanto empiecen las corridas fuertes, y la “plaza” de San Blas era una de ellas. No creo que vaya por ahí el asunto, esta semana se han topado con un Villanueva al que encuentro como uno de los equipos más peligrosos e incómodos de la liga, si no el que más. Jesús Cuevas ha confeccionado un grupo serio, compacto y con mucho oficio que sabe adaptarse a cualquier situación de partido. Si tienen que defender, defieden como nadie, y cuando atacan, lo hacen con velocidad y haciendo mucho daño. Supieron sufrir en Los Villares y casi rascan un punto, fueron dominados en La Carolina y el infortunio les privó al final de llevarse la victoria, y esta semana vencieron a un Útica que viene realizando el mejor fútbol de la categoría. Lo contrario, precisamente, que el Útica, máximos goleadores hasta el momento que tienen en Majuelos al faro que guía el juego ofensivo del equipo pero que encuentran dificultades para mantener la portería a cero. Preocupan los siete goles en contra que llevan los de Antonio Pastor, el equipo más goleado de los nueve primeros de la tabla.
Y mención a parte merecen Racing Jaén Clima y Carolinense, clubs donde nadie cobra un solo euro y sin embargo parece que aguantarán el tirón de los de arriba e incluso puede que alcancen más protagonismo con el paso de las jornadas. Esta semana, el Carolinense hundió aun más al Villargordo y el Racing aplastó a un Hispania que no discutió el partido en ningún momento ya que la superioridad de los de Joaquín Pérez fue abrumadora con un Pingu en estado de gracia que consiguió su primer hat trick de la temporada. Tan solo una mala noticia dejó el partido para los de la capital, la lesión de rodilla de Jose Manuel cuyo alcance de la gravedad aun se desconoce y que se une a la de Rafa Luque, que estará tres meses de baja por una lesión en su tobillo izquierdo. Este contratiempo nos dejó la anécdota de la jornada, cuando Buyo, portero del Racing, tuvo que entrar en el partido como jugador de campo al haber hecho su equipo los otros cuatro cambios permitidos.