El "7" del Barça volverá a venderse.

La última camiseta del Barça que he visto por la calle con el número siete en la espalda fue la de Luis Figo. Los aficionados de a pie, del Barça, dejaron de comprar la camiseta con el número siete cuando Florentino se llevó al portugués al Real Madrid en verano del 2000. Y no porque este número sea odiado desde entonces, sino porque ninguna vaca sagrada ha vuelto a lucir el siete del Barça.

El siete del Barça lo llevaron gente como Alfonso, Dani, Saviola, Larsson (que dió un gran rendimiento), Gudjohnsen... e incluso recuerdo habérselo visto en una ocasión, no hace mucho, al canterano Jeffren. Sin embargo, en todos estos años, no he vuelto a ver al siete del Barça por la calle, parece que no es apetitoso llevar puesto el nombre de Gudjohnsen, por ejemplo.

La Masía siguió fabricando futbolistas que se han convertido en auténticos referentes del fútbol mundial pero ninguno portó el siete. Así que ahora podemos ver por la calle camisetas de Iniesta y su "8", Xavi con el "6", Messi (10), Bojan (11), Eto'o, Ibrahimovic...

Hace unos días, el siete de España llegó al Camp Nou convirtiéndose, en mi opinión, en el mejor fichaje desde que llegó Ronaldinho. Es verdad que aun hay que evaluar su rendimiento, pero sus números como goleador y su sacrificio en el campo le bastan para ganarse todo el crédito de la parroquia blaugrana. Y es español. Esta incorporación viene a confirmar también el patinazo que tuvo el club al firmar a Ibrahimovic en aquel intento de contrarrestar la presión mediática que causó Florentino con los fichajes de Ronaldo y Kaka. Al final, el tiempo y Bojan le han dado la razón al Barça: más cantera, y menos cartera. No obstante, lo de Villa me parece una gran inversión. Tiene 28 años, pero tiene más hambre que nadie.