Que Linares tiene, hoy día, su equipo de fútbol en Preferente no es ninguna noticia de última hora, de hecho, es la gran atracción de la categoría. E
stamos de acuerdo en que éste no es su sitio, y que pronto volverá a recuperar su lugar en la historia, la duda es saber dónde está su techo, tal vez 3ª, tal vez 2ªB, o acaso más arriba. El tiempo lo dirá, pero lo que sí está claro es que esa afición merece algo grande, todo esto se le queda pequeño.
stamos de acuerdo en que éste no es su sitio, y que pronto volverá a recuperar su lugar en la historia, la duda es saber dónde está su techo, tal vez 3ª, tal vez 2ªB, o acaso más arriba. El tiempo lo dirá, pero lo que sí está claro es que esa afición merece algo grande, todo esto se le queda pequeño.Estas fotos que veis por aquí pertenecen al estadio de Linarejos (podéis pinchar sobre ellas para agrandarlas), un estadio adecentado y recién pintado por los propios aficionados azulillos. Aun siendo Linarejos un estadio Municipal, el Ayuntamiento sólo se ha encargado de la pintura, pero han sido los
aficionados quienes se han brindado voluntariamente para hacer el trabajo y lavar la cara de su campo de fútbol.
aficionados quienes se han brindado voluntariamente para hacer el trabajo y lavar la cara de su campo de fútbol.Es fácil subirse a la cresta de la ola y dejarse llevar. Es bonito viajar a otras ciudades de España para acompañar a tu equipo en una fase de ascenso o sacarse un abono para ver jugar a un buen equipo de fútbol, pero la mejor afición no es la que más ruido hace, sino la que está siempre ahí, en lo bueno y en lo malo. Existen precedentes en todos los niveles: el Atleti bajó a segunda y triplicó su número de socios 
y abonados en el mes siguiente; el Real Jaén ha estado al borde de la desaparición y sus socios han arrimado el hombro; Valdepeñas se jugaba el descenso sin su campo, jugando como local en Martos, y desplazó a cientos de aficionados para arropar al equipo en esos momentos tan duros; y ahora Linares, acostumbrado a las fases de ascenso a 2ª División, empieza de cero y desde abajo y su afición responde de esta manera. Efectivamente, este equipo está condenado a volver a ser grande.
y abonados en el mes siguiente; el Real Jaén ha estado al borde de la desaparición y sus socios han arrimado el hombro; Valdepeñas se jugaba el descenso sin su campo, jugando como local en Martos, y desplazó a cientos de aficionados para arropar al equipo en esos momentos tan duros; y ahora Linares, acostumbrado a las fases de ascenso a 2ª División, empieza de cero y desde abajo y su afición responde de esta manera. Efectivamente, este equipo está condenado a volver a ser grande.