Villargordo 2-0 Útica

Amistades a parte, tengo que empezar por decir que me duele que el Villargordo sea equipo de Primera Regional. Que nadie me mal interprete, no estoy, ni voy a utilizar estas líneas para quejarme ni reclamar nada. El Villargordo perdió la categoría de manera justa y el próximo otoño arrancará donde se merece, en Primera Regional. Se lo ganó a pulso y así debe de ser. Pero ayer por la tarde sentí pena al ver el verdadero potencial que podría tener este equipo si todos se implicaran. Porque si el Villargordo llevaba varias temporadas coqueteando con el descenso, era precisamente por eso. Cuando estudias lo justo para buscar el aprobado, sueles suspender.

Ayer Villargordo presentó un equipo que, si durante los próximos meses se involucra en su causa, no sólo ascenderá, sino que no descendería si jugara en Preferente. Sobre todo me encantó su centro del campo con Luis Juan y Manuel, acompañados también por Jose Juan y Crespo en la segunda parte. También siguen Pollo, Manolo y Fernando, Dhalid está en la recamara, y Juan anda muy seguro en la portería. Además, el cesped artificial ha dado vida al fútbol del pueblo y según cuentan, Villargordo prepara una cantera con futbolistas a tener en cuenta. Pensándolo bien, tal vez sea positivo volver a poner el contador a cero, arrancar desde abajo, pero yo les echaré de menos en la Preferente más guapa de los últimos años.

El resultado del partido es lo de menos. Ganó Villargordo y, como os cuento, ofreció bonitas triangulaciones que dejaron buen sabor de boca. Sobre todo porque en frente estaba el Útica, demasiado tierno aun, sí, pero sin perder el estilo ni la filosofía. Sigue apostando por el buen fútbol y por la cantera. La gran temporada del filial no ha caído en saco roto y Joaquín Pérez no escatima en probaturas. Los juveniles tienen y tendrán sus oportunidades, y podrán escoltar a los Chico, Javier, Lara, Majuelos, Pedro... que un año más llevarán el peso del fútbol en Marmolejo. El Útica perdió ayer, pero tiene buena pinta.