
Cuento esta introducción para que veáis que no soy aficionado a ir por ahí apedreando árbitros, precisamente. De hecho, mantengo muy buena relación con muchos de ellos, pero aun siendo la mayoría del colectivo gente honrada y justa, que unas veces se equivocan más, y otras menos (como todas las personas), en el mundo del arbitraje también hay piratas. Uno de ellos arbitró el domingo pasado el partido Los Villares-Iliturgi.
Fui a ver el envite con un par de colegas, también relacionados con el mundillo de la Preferente, y vimos la victoria de Los Villares ante el Iliturgi en un partido que se desarrolló de forma correcta y normal. Unas cuantas amarillas por aquí, otras cuantas por allá... y un par de expulsiones, lo normal. En un mismo lance, el colegiado toxiriano expulsó con roja directa al central de Los

Pero la noticia salta cuando, repasando las actas del Comité de Competición, observo que ni Ruano, ni Rodri, aparecen como jugadores sancionados. Además, ayer por la tarde recibí la llamada de un entrenador de la provincia que también dio cuenta de esta situación, y me explica que ya se ha puesto en contacto con el Comité para informar del error, pero la respuesta del Comité es soprendente: "En el acta arbitral no aparece ninguna expulsión en ese partido". Sencillamente vergonzoso. Supongo que os estaréis preguntando quién es el célebre colegiado. Permitidme que no de su nombre, al igual que tampoco dimos nombres de piratas en el fútbol, aunque espero que el nuevo y flamante Delegado de los árbitros, Pablo Sánchez, tome cartas en el asunto.
Los árbitros están para impartir justicia, no para adulterar competiciones.