EDUCAR Y ENTRENAR EN LA DIVERSIDAD

Os presento un artículo muy interesante de José Ángel García, psicólogo deportivo y entrenador de fútbol base, Nivel 1.




"Las personas inteligentes aprenden siempre,
las otras tratan de enseñar constantemente".



No es fácil determinar con precisión la diferencia entre estos dos conceptos: entrenar y educar. ¿Qué es entrenamiento que no sea educación? ¿Qué es educación que no sea entrenamiento? Quien entrena educa, y quien educa entrena. No hay entrenamiento sin educación ni educación sin entrenamiento. Quien entrena abre caminos, pero no obliga a recorrerlos; quien entrena señala puertos, pero no impone la navegación ni sustituye al marinero; quien entrena señala el horizonte, pero no exige que el otro lo alcance con la mano. Los entrenadores forman a quienes entrenan como los océanos forman a los continentes, retirándose. Puestos a afinar, yo diría que el entrenamiento es una parcela de la educación, no un mero complemento.


Todo ello supone abrirnos hacia nuevas perspectivas para comprender el fútbol y la educación:


Desde la certeza a la incertidumbre

Si no se ponen en tela de juicio las prácticas de entrenamiento, será difícil conseguir su mejora. Me preocupa la falta de autocrítica y la cerrazón que observo en algunos "profesionales" de la enseñanza del fútbol, quizás amarrados al hecho de que como "profesionales" de la enseñanza nuestra tarea es la de enseñar y no (al parecer) la de aprender. La duda es un estado intelectualmente incómodo; la certeza es un estado intelectualmente ridículo. Pensar que se sabe todo, que todo se hace bien, que sólo los demás se equivocan, es insostenible. Desde una actitud impermeable será muy difícil diagnosticar los problemas y buscar soluciones adecuadas para resolverlos. Será imposible descubrir nuevos caminos para avanzar.


Desde la simplicidad a la complejidad

Los problemas de la práctica del fútbol son muy complejos. Existen componentes psicológicos, didácticos, emocionales, éticos, sociales¿Cómo es posible utilizar explicaciones sencillas para explicar realidades complejas? Las explicaciones simples defienden posiciones e intereses particulares.


Desde la uniformidad a la diversidad

Cada grupo es único, irrepetible, es dinámico, está atravesado por una red de relaciones y de emociones cambiantes...Cada persona tiene unas capacidades diferentes, un ritmo de aprendizaje distinto, unas motivaciones, unas expectativas e ideas previas diferentes. ¿Cómo puede hacerse en un grupo como si todos tuviesen las mismas ideas en la cabeza, los mismos deseos e intereses en el corazón? Si la filosofía de la diversidad llega al fútbol y también a los entrenadores, directivos, padres y madres, se habrá creado una actitud sensible hacia las peculiaridades de cada uno y un compromiso de ayuda para aquellos que parten de una situación de desventaja.


Educamos como somos, no como decimos que los demás tienen que ser
. Esta última reflexión hace referencia a la dimensión afectiva del entrenamiento y de la educación. Los niños aprenden de aquellos entrenadores a los que aman, y aman a quienes se preocupan por ellos, a quienes muestran cercanía y se presentan como ejemplo. "¿Cómo podría enseñarle algo? No me quiere...", decía un entrenador clarividente.