Mañana tenemos partidazo de infantiles en la Primera Provincial. El Linares CF 2011 recibe la visita de la Fundación del Real Jaén, o lo que es lo mismo, el equipo infantil de primer año del Real Jaén. Aunque el conjunto blanco cuenta con otro equipo infantil en categoría autonómica, tal vez sea este equipo "B" la joya de la corona, la generación con más talento de la cantera. Estos chicos nacidos en el año 1999 nos deslumbraron la pasada campaña con una actuación brillante en fútbol sala (proclamándose subcampeones de España) y en fútbol 7, donde alcanzaron la semifinal del Campeonato de Andalucía. Sin embargo, precisamente por tratarse de niños de primer año, esta temporada no podemos situarles entre los principales aspirantes al títutlo.
Dirigido por Tete Badillo, el infantil B del Real Jaén está situado en quinta posición con dieciséis puntos, a cinco del líder (Úbeda Viva) y a cuatro de la Peña Deportiva Jiennense, que es segunda con veinte puntos y aspira también al ascenso de categoría. No obstante, este Real Jaén ya se ha ganado el respeto de sus rivales y la admiración de los aficionados en general, contrarrestando su inferioridad física con una apuesta futbolística generosa y atractiva. Aunque es injusto no hacer mención a todos y cada uno de estos chicos, confieso que mi mayor debilidad se llama Antonio Gallardo "Antoñín", uno de los principales baluartes de ese estilo que pretende esconder el balón a base de inteligencia y largas posesiones.
En frente tendrán al Linares 2011, un equipo entrenado por Lázaro Gámez y compuesto principalmente por infantiles nacidos en 1998, entre los que destaca Alfonso Delgado, máximo goleador del equipo y tercero en la clasificación general con 13 dianas. El clásico llega, por tanto, más igualado que nunca, pues ambos equipos suman dieciséis puntos y cuentan con plantillas muy competitivas. Pero ante tal igualdad, el factor campo será determinante a la hora de inclinar la balanza hacia uno u otro equipo, y en este caso, pienso que el Linares tiene mucho ganado al jugarse este partido en el anexo de Linarejos, un campo de tierra que probablemente se presente embarrado hasta los ojos.
Jugar bajo estas condiciones conducirá el encuentro hacia un partido físico, donde dificilmente se podrá jugar por el suelo. Anulada la principal arma del Real Jaén, el Linares tratará de aprovechar sus capacidades físicas (superiores, por edad, a las de su rival) para llevarse el partido y ascender puestos en la clasificación. Pero pase lo que pase, ocurra lo que ocurra, espero que nadie olvide que sólo se trata de un partido de niños. Sí, es un Linares-Real Jaén y desde aquí soy el primero en realzar este partido como algo especial, sin embargo pienso que es una oportunidad inmejorable para alimentar esa rivalidad sana entre las dos ciudades referencia de nuestra provincia. Insisto, rivalidad sana. Siempre desde la amistad y el deporte.