El pasado domingo, tras la derrota del Beas de Segura en casa ante el Santo Tomé por 0-2, el técnico Fernando Rascón decidió presentar su dimisión al considerar que "el equipo necesita una revolución". El Beas de Segura, que este verano perdió a algunos de sus principales futbolistas, está firmando una actuación en liga que muy poca gente podía haber previsto en pretemporada, teniendo en cuenta que la pasada campaña el Beas de Segura cerró la competición doméstica en sexta posición.
Luis Fernando Muñoz, responsable de deportes del Ayuntamiento de Beas de Segura, se hará cargo de la primera plantilla hasta el final de temporada. Por delante le espera un reto cuyo principal y único objetivo radica en salvar la categoría y evitar el descenso a Primera Regional. Sin embargo, a pesar de que están a dos puntos de la salvación, el panorama es desolador y pocos confían ya en que el Beas de Segura pueda remontar el vuelo, máxime, al comprobar el espinoso calendario que resta por delante: viajan a Navas de San Juan, Andújar, Villargordo y Jódar; y reciben a Los Villares, Guarromán y Bailén.
Pero allí entienden de toros, de raza y de bravura. La esperanza es lo último que se pierde.