Te quiero de vuelta.


Nos deja un clásico. No recuerdo la última ocasión en que el Valdepeñas anduvo por la Primera Provincial. Supongo que debió de ser en el siglo pasado, porque desde que tengo uso de razón y desde que, hace nueve temporadas, los compañeros de lapreferente.com andan recogiendo datos en la red, los valdepeñeros han mantenido a su equipo de fútbol en Regional Preferente. Ojo, a excepción de la temporada 2004/05, cuando la FAF cogió a los siete primeros clasificados y los infiltró en una nueva liga en la que se iban a enfrentar a ocho equipos malagueños: la Primera Andaluza. El caso es que, localizada esta única ausencia, se trata del equipo de nuestra provincia que más temporadas ha permanecido en Preferente durante lo que llevamos de siglo XXI. Hablamos de una década. Aun más...

Pues ayer se nos marchó a Primera Provincial desde tiempos inmemoriales, insisto. Como el Beas, Valdepeñas se dejó remontar ayer un 1-2 en Porcuna para terminar perdiendo por 3-2 y volver a la cruda realidad tras un espejismo de tres partidos seguidos sin perder. Esa fue la tónica de toda la temporada: un pequeño oasis de victorias por cada muchos kilómetros de sed, fatiga y sufrimiento. El Valde comenzó la liga como siempre, herido y defenestrado por aceitunas, manzanas y uvas, pero a diferencia de otros años, esta vez no supo sobreponerse a un arranque lleno de dudas. El trastorno, que solía desaparecer durante la segunda vuelta, adquirió carácter crónico y ha terminado llevándose por delante a un histórico de la Preferente.

Confieso que no me podía imaginar -solicito vuestro indulto y permiso para escribir con el corazón llegados a este punto- una Preferente sin el Valdepeñas. En mis quinielas, resolvía ecuaciones e imaginaba carambolas con tal de sacarles de ahí abajo. "Saldrán adelante, saldrán..." me repetía una y otra vez, pero las semanas se quemaban en el calendario y el equipo seguía gripado. La cantera, tan defendida en este salón durante conflictos interminables, no ha sido argumento de peso como para salvar el pellejo. Sin embargo, no creo que la solución pase ahora por dar un volantazo, porque esa apuesta y esa filosofía permitirá al Valdepeñas salir de nuevo a la superficie, y con la que está cayendo, una segunda oportunidad es un lujo muy escaso por estos lares.


Así que en estos momentos difíciles, toca reflexionarlevantarse, sacar ese orgullo valdepeñero y volver cuanto antes. La Preferente es la casa del Valde.
No me tardes en volver. A las 12:00 en casa.