TRONCHO SOSTIENE AL CAROLINENSE.


¿Puede ser un portero el mejor futbolista del mundo? La cuestión viene sobrevolando las mentes de muchos periodistas desde que la Selección Española de fútbol se convirtió este verano en el mejor equipo de todos los tiempos, una generación de futbolistas que ha extendido sus dominios a lo largo de todo el planeta y durante más de cuatro años. El capitán de este imperio se llama Iker Casillas y es portero. En sus manos cambió la historia, allá por el 2008, en aquella mítica tanda de penaltis ante Italia; levantó la Copa del Mundo en Suráfrica después de salvar otro penalti a Paraguay y de frenar las galopadas de Robben; y volvió a aparecer ante Croacia durante la Euro de este verano. En el Bernabeu hace tiempo que se acostumbraron a los milagros. El caso es que, volviendo a la pregunta del principio, la respuesta es sí.

Esta mañana (vuelve el partido de las 12:00) nos lo confirmó el portero del Carolinense. Como el Santo de Móstoles, Antonio "Troncho" se vistió de superhéroe y volvió a demostrar que un portero puede ser tan decisivo como cualquier otro futbolista. Salió al rescate de un equipo físicamente hundido que se adelantó a la media hora de partido mediante una bonita triangulación culminada por Lili. El 0-1 dibujó un panorama ideal para el conjunto de Paco Sabiote, que juntó sus líneas, se agrupó atrás, y concedió todo el protagonismo al equipo de La Guardia, total y absoluto dominador. Los de Paco Badillo expusieron juego, estrategia y ocasiones como para haber ganado el partido de forma cómoda, sin embargo, todos los argumentos se estrellaron contra un tipo empeñado en dignificar, más si cabe, la figura del portero.

Si los delanteros se anotan goles, esta mañana hubo que registrar también el número de paradas prodigiosas que Troncho realizó durante toda la segunda parte. Cuando su equipo terminó de fundirse, La Guardia cercó la portería del Carolinense y él apareció para sacar tres "mano a mano" y desmantelar un sinfín de claras ocasiones. En esa búsqueda desesperada por el empate, La Guardia pudo remontar y el Carolinense, a su vez, pudo cerrar definitivamente el partido al contragolpe, pero Buyo (que se unió a la fiesta de Troncho) y el larguero, evitaron un castigo mayor.


Sí, un portero puede erigirse como mejor jugador de un partido, y como mejor futbolista del mundo.